¿De qué material están hechos los cuencos tibetanos?
Los cuencos tibetanos están hechos principalmente de siete metales o aleaciones metálicas: oro, plata, mercurio, cobre, hierro, plomo y estaño. La cantidad se divide según la proporción del sol y la luna para conseguir el efecto de sinergia.
Estos siete metales con propiedades acústicas especiales se corresponden con los siete planetas de la antigüedad. La aleación de bronce está hecha de una combinación de cobre (Marte) y estaño (Júpiter), con algunos oligoelementos adicionales que suelen incluir hierro (Saturno), plata (Luna) y oro (Sol).
Cada uno de estos metales es también un elemento de las antiguas hierbas que nuestros ancestros utilizaban para curar. Por ejemplo, durante un parto se utilizaban cuencos cantores para devolver la energía al cuerpo.
Los cuencos metálicos suelen ser de bronce, latón o cobre, mientras que los cuencos de cerámica vienen en una variedad de composiciones de arcilla y esmaltes. Para obtener el máximo beneficio, se recomienda utilizar un metal inerte (no reactivo) para el cuenco. Se ha comprobado que el cobre y el latón tienen cualidades beneficiosas cuando se utilizan como recipientes o copas para alimentos, pero algunas personas son sensibles a estos metales; por lo tanto, un cuenco de cerámica puede ser una mejor opción.
Tradicionalmente se utiliza una aleación de bronce compuesta principalmente por cobre, estaño, zinc y plomo. Esta aleación metálica puede tener un color que va desde el tono dorado hasta el marrón oscuro, lo que refleja la cantidad de estaño utilizada en su creación. Cuanto mayor sea el contenido de estaño, más alto y dulce será el tono.
Estos cuencos ofrecen una verdadera resonancia armónica con sonidos complejos y de múltiples capas cuando son golpeados o frotados por el percutor de madera hecho a mano.
Los cuencos tibetanos producen algunos de los sonidos más celestiales y fascinantes, aportando una sensación de paz y bienestar a quienes los escuchan. Perfecto para meditar o durante una práctica de yoga, el uso del versátil borde del cuenco con el percutor de madera cubierto de gamuza crea una vibración armónica que se dice que limpia la energía negativa de su mente y cuerpo.
Atrévete a probar el poder curativo de los cuencos tibetanos y ya nunca te separarás de él.