Para qué sirven los cuencos tibetanos

Los cuencos tibetanos se utilizan para crear un sonido único o una vibración que puede utilizarse con diversos fines. Los cuencos son de bronce y están hechos a mano con un fondo plano que facilita la resonancia del sonido. Desde hace miles de años se han utilizado para la curación, la meditación y otras prácticas religiosas, así como para la decoración del hogar. Aquí vamos a enseñarte para qué sirven los cuencos tibetanos, qué usos y utilidades se les puede dar y de qué manera pueden ser beneficiosos para ti.

En verdad, son ideales para casi todo. Desde la relajación y la meditación hasta la oración, la terapia de sonido e incluso el baño, los cuencos cantores son muy versátiles.

Estos cuencos también pueden ser eficaces para controlar el estrés y crear armonía tanto a nivel interno como externo. Se cree que la pureza del tono obtenido con los cuencos cantores guía los pensamientos en una dirección positiva, fomentando un estado de armonía con uno mismo y con el entorno. Así pues, pueden disfrutarse únicamente por su naturaleza melódica, o bien incorporarse hábilmente a las prácticas de sanación con sonido.

Se cree que los cuencos cantores son terapéuticos tanto para el sanador como para el paciente.

Para todo esto y mucho más sirven los cuencos tibetanos:

  • Son instrumentos de curación, sanación, relajación y meditación que nos ayudan a establecer una vibración saludable en todo nuestro organismo, tanto a nivel físico, mental y espiritual.
  • Sirven para recargar nuestro sistema energético, para aliviar el sufrimiento y el dolor (incluido el dolor emocional), para reducir la inflamación y combatir la ansiedad, la angustia, el estrés, la depresión, la tristeza, el insomnio o la hiperactividad.
  • Son un medio óptimo para equilibrar los chakras y cambiar la conciencia desde un estado alterado de ansiedad y estrés hacia un estado de paz, relajación y tranquilidad, induciendo estados de sanación espontánea y estados místicos y elevando nuestra frecuencia vibratoria.
  • Nos ayudan a resonar con nuestra verdadera conciencia o Yo interior y con ese sentimiento de paz y serenidad que todos llevamos dentro.
  • Mediante su vibración se puede conseguir la autodestrucción de las células cancerosas y la curación de infinidad de enfermedades.
  • Proporcionan una mayor claridad mental, aumento de la creatividad, mayor concentración, visión de futuro y una gran sensación de paz. El resultado es un individuo más productivo, más centrado y más en paz consigo mismo.
  • Calman la mente, y con ello el cuerpo, y tienen efectos emocionales que influyen en los neurotransmisores y en los neuropéptidos, que a su vez ayudan a regular nuestro sistema inmunitario, ese sanador que llevamos dentro.

CUENCOS BUDISTAS

La realidad es que los cuencos cantores se vienen tocando desde hace al menos 2000 años. Los monjes tibetanos los utilizaban originalmente para aportar armonía y equilibrio a sus vidas. Desde entonces, han ido ganando popularidad y ahora se encuentran habitualmente en tiendas New Age o de productos holísticos.

Por lo tanto, son un instrumento sagrado, típicamente asociado a los budistas, pero no es necesario ser religioso o espiritual para utilizarlos. Cualquiera puede usar los cuencos cantores por sus sonidos relajantes o incorporarlos a una práctica de meditación. Los cuencos tibetanos pueden utilizarse en prácticas de curación y en meditaciones sonoras, y también son hermosas piezas de coleccionista.

Los cuencos tibetanos forman parte de la tradición musical del Himalaya. El hermoso sonido de estos cuencos artesanales se utiliza para la meditación, la relajación, el masaje y el bienestar personal.

Los cuencos cantores se han utilizado desde la época de Buda para la meditación, la curación, la creación de música y el bienestar general. En el Tíbet se encuentran en los monasterios, en las casas de los yoguis y en los hogares como alarmas matutinas.

Los budistas usan estos cuencos durante los rituales de oración buscando un lugar tranquilo y meditando en él, aunque también pueden utilizarlos como un cuenco normal, para servir comida o bebida.

Vibraciones curativas

Estos cuencos resuenan con el sonido cuando se agitan o se golpean con un mazo de madera, y crean diferentes sonidos que se utilizan para diferentes tipos de meditación. Son una excelente ayuda para la meditación porque, aunque la persona tiene que concentrarse en lo que está haciendo, la música llena su mente y su cuerpo de vibraciones positivas.

Meditar con las vibraciones de estos gongs relaja la mente, ayuda a concentrarse mejor e incluso mejora la capacidad de resolver problemas. Además de estos beneficios espirituales, se dice que los cuencos tibetanos ayudan a curar una serie de problemas de salud.

Existen muchas teorías sobre cómo se cree que los cuencos tibetanos nos hacen sentir mejor cuando los escuchamos. Algunos opinan que la amplitud de las ondas sonoras nos tranquiliza, mientras que otros creen que es la reverberación en nuestros oídos lo que provoca la relajación.

Su sonido hace que el patrón de ondas cerebrales cambie, induciendo un estado de paz y meditación sin esfuerzo.

Se cree que los cuencos tibetanos tienen vibraciones curativas de las frecuencias Solfeggio inherentes a ellos. Pueden utilizarse para relajarse y meditar, para diagnosticar o tratar problemas de salud, ayudar a la relajación o ayudar a los niños a dormir.

USOS Y UTILIDADES DE LOS CUENCOS TIBETANOS

Aquí te mostramos algunos de los usos y utilidades que se les puede dar a los cuencos tibetanos.